Algunos de nosotros muy preparados y otros arrastrando lesiones, el 23 de junio a las 7:30 h. estábamos todos allí, 22 corredores de nuestras filas, cargados de barritas energéticas y de nervios, esperando el cohete mientras los helicópteros de la organización sobrevolaban nuestras cabezas.
Ramón que en un grave accidente que tuvo la semana anterior, no pudo acompañarnos con su montura, pero nos animó a todos los componentes.